Comenzamos la semana presentándoos uno de los productos artesanales que más éxito ha tenido: boches de zapatos flamencos.
Como ya os comenté, mi querida madre es muy aficionada al flamenco, las sevillanas y todo lo que signifique ponerse un traje de gitana y bailar con las amigas. Ella acude a clases de danza y como regalo para sus compañeras y su profesora hizo estos broches de fieltro. Encantaron y durante algunos meses mi madre tuvo que confeccionar muchísimos zapatos que le encargaban personas ya fuera del grupo de danza.
Los zapatos tienen todos el mismo patrón, cosidos a mano, rellenos de guata y con el estampado de topos pegado uno por uno. El pie y el zapato son de fieltro, pero mi madre añadió el botón en el cierre que le aporta ese último detalle que tanto gusta. Aunque el botón ha sido lo más utilizado, como vemos en el broche de arriba un lacito también es una buena opción, depende del carácter que se le quiera dar al zapato.
Y aquí tenéis la versión masculina:
Los zapatos del grupo de danza eran todos en clásico color rojo con topos blancos, pero tras el éxito rotundo de los broches, mi madre tuvo que hacerlos en multitud de colores. ¿Cuál os gusta más?
