El final de curso ya está aquí. Los peques ya están en casa y para nosotras esta es la última semana de nuestro segundo año. Aún nos quedan los CURSOS INTENSIVOS DE JULIO, pero el curso regular llega a su fin y es el momento de mirar atrás y evaluar todo lo maravilloso que ha aportado este año escolar.
Podría extenderme hablando de los alumnos más guapos del universo, pero creo que las fotos de la cena de fin de curso lo dicen todo. Hoy os traigo otro fin de curso de otra escuela, en concreto de la escuela de adultos de Alcalá de Henares, que hace dos añitos decidieron hacerle un regalazo a su profe de teatro, literatura e informática con este fofucho personalizado.
Esta fue una de las fofuchas más grandes del año pues consta de un completísimo escenario. El muñeco está sacado a partir de una fotografía. La chaqueta es de goma EVA con las rayas pintadas a mano y el pantalón está hecho de tela vaquera, con remates y todo. Los zapatos con cordones y la reproducción de un broche muy querido por él le dan los últimos detalles. El pelo, con las piezas pegadas una a una, y la cara, son obra de mi hermana, claro.
El background del escenario, como veis, es completísimo. Suelo de baldosas. Silla y escritorio con ordenador, teclado, ratón y teléfono (todo debidamente conectado). Pizarra con sus tizas. Mapamundi debidamente desenrollado y colgado. Planta con su maceta y sus piedrecitas. Estantería con sus libros,hechos uno por uno y pegados de forma que queden colocados de manera natural. Los libros se consiguen imprimiendo las tapas en miniatura, recortando, doblando los papeles y pegando.
Todos los detalles relacionan al profesor con sus clases: los libros para las de literatura, el ordenador para la informática y el precioso símbolo del teatro que cuelga de la pared, para sus clases de teatro. Esta es mi parte favorita del fofucho y personalmente creo que le da el toque final.
¿Qué os parece?